El estudio explora las experiencias de discriminación y estigmatización de les “prosumidores”, psicólogues con experiencias vividas de malestar psicológico.
Por José Giovanni Luiggi-Hernández, PhD, MPH
Originalmente publicado en inglés
Un estudio reciente publicado en Psychological Services exploró cómo les “prosumidores” de los servicios psicológicos —en este caso, psicólogues con experiencias vividas de malestar psicológico que utilizaron servicios de salud mental— experimentaron el estigma relacionado con la salud mental.
La Dra. Laura López-Aybar y otras investigadoras de la Universidad de Adelphi y del Centro Médico Irving de la Universidad de Columbia desarrollaron un estudio de métodos mixtos para comprender mejor las experiencias de estigmatización de les prosumidores. A través de su análisis cualitativo, encontraron que los prosumidores presenciaron discriminación, anticiparon y internalizaron el estigma, y trataron de resistir la estigmatización dentro de su campo y en sus comunidades.
Según las autoras:
“Les psicólogues y les profesionales de la salud mental, en general, no están exentos de tener puntos de vista y actitudes estigmatizantes. En promedio, los profesionales de la salud mental son menos propensos que les miembres de la comunidad y otres proveedores de atención médica a discriminar, y tienen actitudes más flexibles. Sin embargo, estes profesionales aún mantienen sesgos implícitos y visiones estereotipadas hacia las personas con etiquetas psiquiátricas.”
El estigma se ha entendido como un “sello deshonroso” o una etiqueta asignada a personas o grupos que conduce a prejuicios. El campo de la salud pública ha identificado el estigma como un determinante social de la salud; esta etiqueta viene acompañada de dinámicas institucionales e interpersonales discriminatorias, que dejan a los estigmatizados vulnerables y marginados.
El estigma psiquiátrico a menudo lleva a quienes son estigmatizados a sentir vergüenza y desesperanza, a tener una disminución de su autoestima y a experimentar ideación suicida. Diferentes diagnósticos están asociados con distintos grados de estigmatización, ya que el estigma está parcialmente relacionado con el miedo y la incomprensión. Esto podría explicar el estigma dispar contra las personas diagnosticadas con trastornos psicóticos, lo que aumenta su malestar psicológico.
Mientras que el modelo biomédico y otras teorías individualizantes de la salud mental han servido para reproducir el estigma psiquiátrico, los modelos psicosociales de la salud mental y la comprensión del malestar psicológico como un continuo ayudan a reducir el estigma.
Muches psicólogues y estudiantes en formación tienen actitudes estigmatizantes hacia las personas con diagnósticos psiquiátricos, a pesar de que, en promedio, son menos propensos a discriminarlas. Esto incluye a les “prosumidores” de la psicología clínica, que tienen experiencias vividas de malestar psicológico y utilizan servicios de salud mental. Les prosumidores a menudo son testigos y anticipan estigma y discriminación debido a sus diagnósticos, sin embargo, muchos siguen sintiéndose atraídos por la formación en psicología clínica debido a sus experiencias con el malestar psicológico.
Sin embargo, los programas de formación a menudo discriminan a estos solicitantes. Algunes evaluadores del profesorado incluso se oponen a la divulgación de etiquetas psiquiátricas en los materiales de solicitud de posgrado. Estos actos de “control de acceso” pueden impedir que individuos altamente capacitados y competentes ingresen a los programas de psicología de posgrado.
Incluso después de la formación y al convertirse en clínicos, los prosumers continúan experimentando los efectos del estigma psiquiátrico. Tienden a tener menos estigma internalizado que les proveedores de salud mental sin un diagnóstico psiquiátrico, pero también experimentan niveles significativamente más altos de estigma anticipado. Los prosumers con formación a nivel doctoral experimentan aún más estigma anticipado y estigma general que aquellos con formación a nivel de maestría.
A pesar de no internalizar a menudo actitudes estigmatizantes, les prosumidores de psicología clínica son más propensos a anticipar discriminación en su contra. Este estigma anticipado aumenta su malestar psicológico y dificulta sus relaciones con colegas, ya que temen que el estigma impacte negativamente su desarrollo profesional. Además, a menudo experimentan discriminación dentro de su propio campo.
Para explorar y comprender las experiencias de estigma y discriminación de los prosumers en la psicología clínica, la Dra. Laura López-Aybar y sus colegas desarrollaron un estudio de métodos mixtos. Los participantes incluyeron a 136 estudiantes de psicología clínica en formación y 39 clínicos a nivel doctoral diagnosticados con cualquier trastorno psiquiátrico del DSM-V.
El estudio encontró que el trastorno depresivo mayor y el trastorno de ansiedad generalizada fueron los diagnósticos más comunes reportados entre les participantes. La Dra. López-Aybar y sus colegas utilizaron una encuesta en línea que incluía preguntas abiertas y medidas cuantitativas de discriminación presenciada, microagresiones, estigma internalizado, estigma anticipado y resistencia al estigma. Usaron estadísticas descriptivas junto con métodos cualitativos de teoría fundamentada para entender las experiencias de estigmatización de los prosumers.
A través del análisis cualitativo, la Dra. López-Aybar desarrolló cuatro categorías centrales para describir y explicar las experiencias de estigma de les participantes: discriminación presenciada, estigma anticipado, estigma internalizado y resistencia al estigma.
Discriminación Presenciada:
La mayoría de les participantes reportaron haber presenciado diversas formas de discriminación. Por ejemplo, muchos prosumers observaron la invalidación de personas con experiencias vividas, una sobrepatologización y la entrega de pronósticos catastróficos. También experimentaron discriminación en forma de actitudes condescendientes, siendo castigados mediante la negación de servicios o la retirada de su autonomía, y siendo objeto de “bromas” dentro de los programas de formación. Presenciar discriminación llevó a un malestar psicológico y a sentimientos negativos hacia el campo de la psicología clínica.
Estigma Anticipado:
Muches participantes informaron anticipar el estigma, lo que incluía el rechazo de su agencia e identidad por parte de otros. Temían ser vistos como incompetentes, sufrir represalias y que sus identidades se redujeran a su diagnóstico. Aunque algunos participantes creían que serían aceptados o celebrados por algunos compañeros, esto dependía de la gravedad percibida de su diagnóstico asignado.
Estigma Internalizado:
Algunes participantes informaron haber experimentado estigma internalizado, lo que llevó a sentimientos de ser poco agradables o no lo suficientemente funcionales para su rol. Sin embargo, otros creían que su diagnóstico los hacía más empáticos y competentes. Les prosumidores creían que colegas, médicos, familiares, amigos, la sociedad y la cultura, así como otras experiencias personales, influían en el desarrollo de su estigma internalizado.
Resistencia al Estigma:
Les prosumidores reportaron participar en acciones destinadas a resistir o desafiar el estigma psiquiátrico. Estas acciones incluyeron la participación en organizaciones profesionales o de base, la enseñanza y la realización de investigaciones para desafiar el estigma. También se comprometieron con la comunidad proporcionando testimonios y desafiando la desinformación. Aunque la resistencia era emocional y profesionalmente agotadora, ofrecía un sentido de empoderamiento, conexión con otros que tenían experiencias similares y motivación para continuar trabajando como clínicos.
Este estudio contribuye a la creciente literatura sobre el estigma contra individuos con diagnósticos psiquiátricos o experiencias vividas de enfermedad mental. Los hallazgos indican que, a pesar de cierto grado de aceptación dentro del campo de la psicología clínica, el estigma persistente impacta tanto a pacientes como a clínicos con diagnósticos psiquiátricos. Aunque les psicologues con experiencias vividas pueden poseer una mayor empatía y comprensión, experimentan un mayor malestar debido a los entornos y dinámicas laborales estigmatizantes que enfrentan.
Por lo tanto, el campo de la psicología clínica, incluidos sus programas de formación y espacios de trabajo, debe continuar evolucionando para crear espacios hospitalarios y humanizadores tanto para pacientes como para clínicos. Tales cambios facilitarían la reducción del estigma y promoverían el crecimiento de una comunidad de psicología clínica más inclusiva y empática.
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López-Aybar, L., Gonzales, L., & Kanani, A. (2023). Prosumers’ experiences of stigma dimensions within the clinical psychology field. Psychological Services. Advanced online publication. https://doi.org/10.1037/ser0000765 (Link)